:35:03
- No podré devolvértelo.
- No me preocupa.
:35:06
Oh, ya sé, ya sé.
¿Para qué tendré ojos en la cara?
:35:11
Es bonita, ¿verdad?
Y tan dulce como bonita.
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- Sí.
- ¿Has pensado en casarte con Velma?
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No lo he pensado
hasta ese punto.
:35:22
En fin, no sé
qué será mejor, pero...
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...antes de que
te gastes tu dinero...
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...debo decirte
algo sobre Velma.
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Bueno, ¿el qué?
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Bueno, tiene un pretendiente.
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Se llama Preiser. Tiene
unos 30 años y está ya divorciado.
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Trabaja en seguros y le va bien,
pero es raro eso de que...
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...un divorciado salga
con una chica tullida...
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...así que trajimos a Velma aquí,
con su madre.
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Pero creo que Velma
sigue pensando en ese tipo.
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No creo que haya nada de malo.
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Bueno, es lo que yo me digo siempre.
Me hace sentir mejor.
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Eso es todo lo que hay, Roy.
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Espero que no te hayas enfadado.
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No, no me he enfadado.
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Sonará raro, y no encuentro
las palabras justas...
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...pero es como si conociera a Velma
desde hace un millón de años.
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Y, conociéndola,
nadie me convencerá...
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...de que ha hecho algo malo.
Porque lo sé, ¿me entiende?
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No debe saber que hemos hablado.
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- Lo que tú digas.
- ¡Dice que tiene remedio!
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Esta joven pronto andará
como todo el mundo.
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¡Esto es maravilloso!
Vamos, dale las gracias a Roy.
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La idea fue suya,
y va a prestarme el dinero.
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¿Usted, Sr. Collins? ¿Usted?