:24:00
- Buenas noches.
- Para dos.
:24:02
Por aquí, señores.
:24:09
- Por aquí, Pola.
- Perdón.
:24:15
Perdón, señora.
:24:22
RESERVADO
:24:27
- ¿Dijo que estaba aquí solo?
- No, hemos venido toda una pandilla.
:24:32
¿Hombres sólo?
:24:33
Algunos con sus esposas.
Las demás se fueron al teatro.
:24:38
- Ya sabe, las mujeres en NY...
- Lo sé.
:24:42
Olga ha ido a cinco teatros
en estos tres días.
:24:46
Ah, sí.
:24:47
- Olga es mi hija.
- ¿De veras?
:24:51
- ¿Vino la Sra. De Merrill con Ud?
- No hay Sra. De Merrill.
:24:56
Y yo vivo en Nueva York.
¿Aclara esto la situación para ambos?
:25:00
Sí, desde luego que lo aclara.
:25:03
- ¿Es Ud. casado?
- ¿Casado?
:25:06
A veces creo que soy el hombre
más casado de EE. UU.
:25:10
¿Sabe cuántas mujeres había
en mi casa hoy?
:25:14
- No, no tengo la menor idea.
- Siete.
:25:18
Mi mujer. Su hermana, cuyo
marido admiro como a un héroe.
:25:23
Su madre, que debe tener 110 años.
Parece un loro y es insoportable.
:25:31
Y tres más cuyos nombres
nunca recuerdo.
:25:34
A decir verdad, no había sentido
la soledad de la viudez...
:25:39
...hasta estos últimos años.
:25:42
Al principio mis hijos
me hacían compañía.
:25:45
Pero ya son mayores. Mi hijo se casó,
Olga va a casarse.
:25:51
La casa empieza a parecerme
muy vacía.
:25:55
- Lo comprendo.
- Debido a eso he viajado mucho.
:25:59
Londres, el sur de Francia, Capri.
Pero eso no soluciona nada.