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¿Cómo te llamas?
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Demetrius, de Corinto.
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Al final de esa calle encontrarás
la casa de mi padre, el senador Galio.
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Tiene una puerta escarlata.
Preséntate ante el sirviente.
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A veces salgo con el senador Galio.
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En ese caso, el esclavo que atiende
la puerta principal enciende las lámparas.
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Ser un esclavo en esta casa
es un honor.
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Ser un esclavo en cualquier lugar
es ser un perro.
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La puerta, ábrela.
Recuerda que has de inclinarte.
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La puerta. Corre, idiota.
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- Buenas noches, Marcipor.
- Buenas noches, mi amo.
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Eres tú.
:13:08
No se encargará de la casa.
Será mi sirviente personal.
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Podías haberte escapado.
¿Por qué no lo has hecho?
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Tengo una deuda contigo, amo.
Pago mis deudas.
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- Razonas como un romano.
- Griego.
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Sí, lo sé. En los años gloriosos de Grecia,
los romanos no éramos más que bárbaros.
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Que Marcipor te muestre dónde guardo
la ropa. Me cambiaré antes de la cena.
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Buenas noches, madre. Lucía.
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Lo siento, ofrecieron
más por las gemelas.
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- Lo sabemos, Marcelo.
- Diana estuvo aquí.
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¿Diana? Debisteis retenerla
hasta que yo llegara.
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Marcelo, nos contó que tú
y Calígula os peleasteis...
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- No te preocupes.
- Calígula está furioso.
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- Le toma demasiado en serio.
- Debe hacerlo.
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- Se va a casar con él.
- ¿Te lo ha dicho ella?