1:02:03
-Muévete.
-Vayan Uds., las alcanzaré.
1:02:30
-¿Eres tú, señorita?
-Sí, Fausto. Debo hablarte.
1:02:34
-Déjame hablarte.
-No digas nada. Cállate.
1:02:38
-¿Comprendes?
-No quiero callarme.
1:02:41
-¿¡Ciccio!?
-Aquí estoy, señor.
1:02:43
-¿Dónde te escondiste?
-Ordene.
1:02:47
Quédate aquí.
Siéntate si hay una silla.
1:02:59
-Por favor, vete.
-No puedo...
1:03:02
¡ Vete!
1:03:08
Ciccio, por Dios.
Dije que te quedaras.
1:03:15
Dime al menos por qué
viniste a Nápoles.
1:03:20
Para que Ciccio conozca la
ciudad africana más nórdica.
1:03:24
No bromees, Fausto. Sé que
se hablaron con Vincenzo.
1:03:28
Pero no sabía que
vendrías. ¿Por qué?
1:03:31
¿Cuál es la razón?
1:03:33
Hay una razón, ya que
eres tan curiosa.
1:03:39
No vine por nada.
Ahora basta, vete a casa.
1:03:42
Sé buena, vete a casa y
déjame solo con Ciccio...
1:03:45
...que tenemos mucho
de qué hablar. Vete.
1:03:48
Fausto...
1:03:52
Bonito vestido, Sara.
1:03:54
Sí, bonito color, sobre todo.
1:03:57
Es el color que
mejor te sienta.