:11:03
¿Debería renunciar a mi trabajo
y vivir contigo en Pekín?
:11:10
Ok.
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No suenas muy entusiasmado.
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Perdón por no parecerlo.
Pero tu me conoces.
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Seria asombroso si
vinieras conmigo.
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¿Lo apreciarías realmente?
:11:31
Por supuesto.
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- Hola, Stéphane.
- Hola, Señora Guetz.
:11:46
- Ese amigo tuyo anticuario es una mina de oro.
- Te dije, ¿No?
:11:50
- ¿Esta Irène aquí?
- Si, pero las cosas no van tan bien.
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¿Que sucede, lrène?
Dime, por favor.
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- Es Marc.
- ¿Un accidente?
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- Ayer a la noche escuche...
- ¿Que?
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Va a dejar la escuela de hotelería.
Se anoto como Coccus.
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Se ira al mar el domingo.
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- Pero todavía es tan joven.
- Diecisiete
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Los niños son tan crueles.
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Uno no les pide nada y les da
todo su amor. Y luego...
:12:31
- Lo extrañare tanto.
- Así son las cosas con los niños
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- No a esa edad.
- No se olvidara de ti.
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Tanguy me ha enseñado
un hermoso proverbio chino
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Un día llamas a tu madre y
así queda por el resto de su vida.
:12:52
- Animo.
- Gracias.