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Te dije que no entraras.
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¡Que frío! Pero donde están...
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¿Donde están las mantas?
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Volvamos, te lo suplico.
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- ¿Quien esta ahí?
- Soy yo.
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- ¿Porque han venido aquí?
- No lo sé. Simplemente entré.
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- Acércate.
- Ya voy.
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Tal vez usted necesite ayuda, buen señor.
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¿Quién es el "buen señor"?
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Yo... Tú...
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Aquí no, allá no.
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Allí no hay nadie.
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Sólo ataúdes y cadáveres. Ven y mira.
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- Ya voy.
- Ese es mi ataúd.
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- ¿Tu ataúd?
- Sí, lo hice yo mismo.
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¿Por qué ese extraño tono, buen señor?
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¿Por qué ataúdes en el Hermitage?
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¡"Buen señor"!
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- Este es mi ataúd.
- Sí, éste el suyo.
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- ¡Parece bien alimentado!
- ¿Pero dónde están los cadáveres?
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¿Por qué preguntas "dónde"?
No camine sobre los cadáveres.
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¡Se ve bien alimentado!
¡Haz caminado sobre los cadáveres!
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- ¿Que sucedió?
- La guerra.
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¿Cuál guerra? ¿Contra quién?
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- Contra Alemania.
- ¿Qué es Alemania?
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El estado unificado de los Alemanes.
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En el siglo 20,
Rusia tuvo una guerra con Alemania.
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Los alemanes rodearon la ciudad.
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Pero la ciudad no se rindió.
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Más de un millón murieron.
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- ¿Más de un millón?
- Sí.
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Ese es un precio muy alto a pagar. Muy alto.
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San Petesburgo y el Hermitage
pagaron uno muy alto.