:58:01
-Gracias, Gilda.
-Soy yo quien te agradece.
:58:04
Adiós.
:58:16
El desayuno está servido.
:58:33
¿No hay jugo de naranja?
:58:34
Nunca tomamos jugo.
:58:36
¿Podrás recordarlo, querida?
Jugo de naranja, todas las mañanas.
:58:40
Un vaso grande.
:58:42
¿Todas las mañanas?
:58:44
Salvo los domingos.
:58:46
Los domingos, manzanas al horno.
:58:49
Será un cambio drástico en mi menú.
:58:54
Los huevos están perfectos.
:58:56
Puedes comer el mio, también.
:59:00
-¿ Gilda no come huevos?
-No.
:59:04
-¿Tu conciencia te atormenta?
-No.
:59:07
¿Estás confundida?
:59:09
Si, muy confundida.
:59:12
-Gilda.
-¿ Si?
:59:15
¿ George sigue rompiendo cosas?
:59:18
Debemos decirle la verdad
sin importar lo que le pase a los muebles.
:59:23
Me pregunto si me golpeará.
:59:26
Nunca fue muy civilizado.
:59:28
Es cierto.
:59:30
Tiene algo de bárbaro.
:59:36
¿ Sabes, Gilda? Hicimos un trabajo
excelente en aquel tercer acto.
:59:41
Creo que si nos juntáramos...
:59:43
y tratáramos de crear algo inmortal,
con mucho esfuerzo...
:59:46
no sólo seria una buena obra literaria...
:59:49
sino que tal vez me ahorraria una golpiza.
:59:51
No, no puedo huir.
:59:53
No sé cómo se lo diré.
No me atrevo ni a pensarlo.
:59:57
Ni siquiera sé qué le diré.