:24:00
- ¿Dónde pongo esto, Srta. Shelley?
- Póngalo ahí.
:24:04
- Perdone, amigo.
- No, póngalo ahí, Eddie.
:24:08
- No le esperaba hasta mediodía.
- Sí, empieza a ser evidente.
:24:14
- ¡Jesús!
- Gracias.
:24:16
- Se habrá enfriado por la lluvia.
- En efecto.
:24:20
- Su madre no tiene tan mal carácter.
- Es muy variable.
:24:25
- ¿Por qué iba a tener mal carácter?
- Anda, mamá, quiere trabajar.
:24:29
Quítate ese pijama.
:24:31
- ¡Anda, mira, Sam Yates!
- Hola, Nora.
:24:34
Me he escondido
en medio de un desfile.
:24:37
- Hombre, Sam Yates.
- Michael. ¡Qué casualidad!
:24:42
- ¿Cómo sabías que quería verlo?
- No sabía que lo conocieras.
:24:46
Fuimos juntos a la facultad.
¿Para qué me has llamado entonces?
:24:50
- Yo no te he llamado.
- ¿Ah, no?
:24:53
- Me pasaron un recado...
- Algún chalado.
:24:59
- ¿Te has peleado con alguien?
- Me peleo tres veces diarias.
:25:03
Tenías tendencia a las broncas.
Creí que lo habías superado.
:25:07
No soporto cómo se porta
la gente con Leopold Dilg.
:25:11
El que se trague lo que dice Holmes
por ahí tendrá que vérselas conmigo.
:25:16
Así que eres el abogado de Dilg.
:25:18
No. Bueno, sí.
El estado me nombró.
:25:22
Dilg me rechazó. Dice que un hombre
inocente no necesita abogado.
:25:25
- Pensador original.
- Desde luego.
:25:28
Es el único hombre honrado
en esta ciudad y quieren colgarlo.
:25:32
¿De verdad?
:25:33
Lleva años diciendo
que Holmes es un sinvergüenza.
:25:37
Es sólo un trabajador con agallas
para enfrentarse al jefe.
:25:41
Además, tiene seguidores.
¿Y qué pasa?
:25:45
Predice que la fábrica se incendiará
y se incendia. Un hombre muere.
:25:49
Es la ocasión de Holmes.
"Ha sido Dilg", dice.
:25:52
Y desata una campaña
frenética contra él.
:25:57
Dilg se fuga porque
no tiene otra opción.