:25:01
- Espérame aquí, por favor.
- Sí, mi señora.
:25:14
El emperador te espera.
:25:43
La noble Diana,
tan bella como siempre.
:25:47
- Y tan fría.
- Me has ordenado que viniera, césar.
:25:51
- Has ignorado mi invitación durante meses.
- He mandado aviso de que estaba enferma.
:25:55
Has elegido acudir a la casa del senador
Galio, que no me profesa ningún afecto.
:26:02
¿No debería considerar
semejante comportamiento una afrenta?
:26:06
Tú eres el emperador.
:26:08
No está en mi poder afrentarte.
:26:11
Bien, bien.
:26:14
Dime, ¿qué noticias tienen
los Galio de su querido hijo Marcelo?
:26:20
- Ninguna, césar.
- ¿Y tú?
:26:24
Debe de haberte escrito.
:26:28
No desde hace un año.
:26:30
Su última carta llegó desde un pueblo
de Palestina llamado Caná.
:26:34
¿Nada desde entonces?
:26:35
¿Nada desde Antioquía,
Éfeso o Corinto?
:26:44
No me mientes, ¿verdad?
:26:47
Pobre Diana.
Te ha engañado, como al resto.
:26:51
- ¿Qué quieres decir?
- Quiero decir que está aquí, en Roma,
:26:55
y lleva aquí algún tiempo.
:26:57
- Es imposible.
- Me engañó a mí también.
:26:59
Creía que no era más
que un gandul y un necio.