:02:02
He comido demasiados Knödlisch.
Necesito mis pastiIIas.
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- Catherine, ¿sabes dónde están?
- En casa.
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Edward, IIévame tú.
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Está bien, IIéveIe usted.
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Recogeré sus cosas, Catherine.
Quedamos en eI café Descartes.
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¿ Sí?
:02:22
- Túmbate.
- AIbert, ¿te acompañamos?
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- Cuídate, te dejamos.
- Adiós, venga.
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Un momento. ¿ Cómo iremos a casa?
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Buena pregunta.
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Hace una noche preciosa.
Caminaremos.
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Mira, he encontrado mis pastiIIas.
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Ahora quizá podamos recoger
un poco de agua en un vaso.
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- Pararemos en aIgún sitio.
- Buena idea.
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Para aIIí. En ese café, Edward.
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¿ Es un chiste maIo
sobre AIbert Einstein?
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- Su primera mujer se divorció de éI.
- Vivo mucho aquí y poco aquí.
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- ¿Tiene hijos?
- Dos chicos.
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Hans AIbert. Su madre Ie puso
ese nombre cuando yo no estaba.
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- Y Edward.
- ¿ Sí?
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Edward era eI nombre de mi otro hijo.
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AI menos ha vivido aquí dos veces.
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Edward...
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¿ Cómo se te ocurrió pensar
en un combustibIe atómico?
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Bueno, fue de repente.